GALDAKAO Y SU DÍA DE LA MARMOTA
Hace meses que me incorporé a trabajar y dejé de vivir Galdakao intensamente. Mi horario laboral -comercial-, me aleja de lo que ocurre día a día en nuestro pueblo. Sin embargo, lo poco que consigo pisar nuestras calles, hace que me invada una DESAGRADABLE sensación de «dejá vu», cuando observo la realidad de nuestro municipio. Una realidad inalterable y que, afortunadamente, puedo seguir -en parte y sesgado- en los grupos de facebook en apasionados debates. Todo ello me ha hecho recordar la película «el día de la marmota».
COSAS QUE SE REPITEN
Vuelvo a ver manifestaciones y concentraciones en favor de la llegada del metro. (…) Y desde aquí todos mis ánimos a toda esa gente que se sigue movilizando en un asunto que concierne y beneficiaría no sólo a todos los de Galdakao, también a otros municipios cercanos. Pero me apena comprobar cómo poco a poco va «mermando» la intensidad de las protestas y como el alcalde, sigue sin dar la cara por esa gente activa y guerrera.
Vuelvo a ver la chapuza de la plaza roja. Sin criterio útil alguno, avanzando al destrozo del lugar, en unas obras que día si y día no, veo paralizadas sin ninguna explicación. Cada día que bajo a la plaza, observo cómo los padres y madres que por allí pasean, se quejan de la obra (y del techado del parque infantil ni hablamos, por si acaso…).
Vuelvo a ver noticias hilarantes, de cosas que se proyectan hacer, pero que se dilatan constantemente en el tiempo. Dando aire al ayuntamiento equipo de gobierno, y sumiendo a la ciudadanía en un estado de conformismo total (no todos, pero ya nos entendemos): Ese Bricomart, esa rotonda en ibaizabal, ese encauzamiento del río con un bidegorri por la ribera, esas escaleras mecánicas en Aperribai, ese vivero de empresas, ese bar de las piscinas, esa demolición del frontón (que sigue sin producirse y que tampoco arreglan para su uso)... Ludotecas anunciadas a bombo y platillo y que tardan MESES y MESES en llevar a cabo…
Día sí y día también, veo gente que manda fotos de su experiencia en la parada de Bolueta y nunca he visto a ningún político que comparta un rato con los vecinos en dicha parada.
Y lo más triste… Es que cuando llega el fin de semana y me da por salir a otros pueblos, a conocer mundo… Me doy cuenta de cuánto falta en Galdakao para estar al nivel de éstos. Donde puedo encontrar: baños públicos, paneles informativos (que también han dicho que van a poner pero de los que DUDO razonablemente), papeleras con expendedoras de bolsas para las cagadas de los perros, aceras amplias y zonas peatonales donde da gusto pasear, zonas infantiles diferenciadas por edad y donde claramente se delimitan edades, usos y prohíben ciertos elementos. Campos de futbito abiertos para que sean disfrutados por cualquiera. Mesas de ping-pong (Sí, soy un pesado, al igual que los paneles informativos, no entiendo cómo aquí no nos podemos permitir algo así) y un largo etc.
Es curioso que, llegado el fin de semana, y cuando pregunto a mis hijos qué quieren hacer, nunca me digan que se quieran quedar en mi pueblo a hacer cualquier cosa. (…) Es que no se puede… Y es una pena.
Mi día de la marmota.
Y supongo que el de muchos de vosotros.
PEREZA
Me da mucha perece hablar de nuestro pueblo. La verdad. Pocas cosas buenas puedo decir del mismo, aunque quizás, he de reconocer la más importante. Que a pesar de todo, sé que hay mucha gente DE PUTA MADRE viviendo por aquí, que hace que merezca la pena ser de Galdakao. Gente que simplemente con su actitud, sus ganas y esfuerzo, hace de este pueblo, un lugar por el que sentir algo. Igual es que, al ser de aquí de toda la vida, sea un puto nostálgico -y perdón por el vocabulario-, y me pase el día fantaseando en lo que podría ser Galdakao de tener un jodido alcalde que se interesara un poquito en MEJORAR EL JODIDO PUEBLO de manera LOGICA y no DESPILFARRANDO TODO NUESTRO PUTO DINERO EN Edificios inútiles que ESTOY 100% SEGURO NO VAMOS A USAR. En fin… Que me cabreo…
Y sí, MI CABREO PERMANENTE CON NUESTRO PUTO ALCALDE, también forma parte de mi día de la marmota.
Lo siento.
Le felicito por su página.
Qué razón tiene en sus artículos y que gusto encontrar información real de la situación de nuestro pueblo.
Cuando vine a vivir a Galdakao hace 15 años me pareció un buen pueblo y con grandes posibilidades… hoy veo como poblaciones como Basauri o Etxebarri le dan mil vueltas en servicios, comunicaciones…
Aunque no estoy muy puesta en política creo que a este Nuestro pueblo ( de sus habitantes y no equipo de alcaldia) le vendría bien un cambio de partido para poder mejorar. Si siempre están los mismos no lucharán por mejorar.
Un saludo